1. Consumir suficiente agua: El 90% de nuestro organismo está compuesto de agua, es decir, somos agua; pero la pregunta es ¿cuánta agua bebes a diario?. Si tienes pérdida de cabello es posible que poca, razón por la cual debes revisar qué cantidad de agua debes tomar a diario según tu índice de masa corporal (IMC) y asegurarte de permanecer bien hidratado. Una práctica que en general beneficiará tu organismo.
2. Hábitos saludables: En muchas ocasiones los hábitos saludables son los que podrían ayudarte con el crecimiento del cabello. Lo ideal para mantener un cabello sano es tener en cuenta que debes alimentarte bien, hacer ejercicio y dormir por lo menos 8 horas en la noche, porque cuando el cuerpo no recibe estos hábitos lo que sucede es que él mismo se encarga de ahorrar energía produciendo menos cabello...
3. Un masaje a la semana: El aceite de ricino es conocido por sus beneficios para el cabello y también es usado para el crecimiento de pestañas y cejas. Como es un aceite grasoso, lo mejor es diluirlo. Añádelo a tu acondicionador o mezcla con aceite de almendras para masajear el cuero cabelludo. También puedes usarlo solo: masajea el cuero cabelludo y déjalo reposar durante la noche.
4. Aléjate del secador y la plancha: Mantén el secador alejado de tu cabeza cuando te seques el cabello. El calor debilita las fibras y por ende el cabello tiene menos fuerza para crecer.
5. Agua fría: Los especialistas recomiendan lavarse el cabello con agua fría, ya que esto mejora la calidad del cabello al cerrar las cutículas del mismo y además lo deja brillante. Este tip ayuda en el crecimiento del cabello al evitar que se caiga, cosa que el agua caliente provoca.
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